El Colegio de Abogados de la Segunda Circunscripción Judicial, con asiento en Rosario, dio a conocer un texto aprobado por su Directorio, previa deliberación de sus integrantes, fijando posición en torno al desarrollo que está teniendo la reforma del procedimiento penal santafesino. A partir del debate que se entabló a través de los medios de comunicación por las declaraciones del fiscal de Cámaras Guillermo Camporini y la respuesta dada a las mismas por el ex ministro de Justicia Héctor Superti, el Colegio de Abogados formuló las consideraciones que se transcriben textualmente a continuación.
"El debate abierto a partir de las declaraciones del fiscal de Cámaras Guillermo Camporini y de la respuesta dada a las mismas por el abogado Héctor Superti, ex ministro de Justicia, al referir al desarrollo que está teniendo la reforma del procedimiento penal santafesino, impone que el Colegio de Abogados formule sus propias reflexiones. La primera y crucial es que el Colegio considera inconducentes estos verdaderos duelos mediáticos entre funcionarios responsables del actual estado de cosas, en momentos como estos en que la comunidad soporta el duro castigo de la inseguridad asociada a la impunidad.
Ello aclarado, y en afán de avanzar en nuestro aporte, aceptamos que el camino que debe seguirse para llevar adelante el cambio ya decidido a nivel legislativo con el voto unánime de todos los representantes del pueblo santafesino es indudablemente muy arduo y no resulta todo lo ágil que sería deseable, pero compartimos el objetivo final indiscutible de establecer un sistema de juzgamiento de mayor calidad y acorde al mandato constitucional.
Este es el motivo por el cual –una vez dictada la norma que impuso un nuevo procedimiento penal y sin dejar una posición crítica por la calidad técnica de algunas de sus disposiciones– el Colegio de Abogados de la Segunda Circunscripción asumió plenamente su apoyo a la tarea de lograr que el nuevo sistema se implemente de la mejor y más rápida manera posible.
Desde nuestra posición de partícipes en este proceso de cambio es que tenemos autoridad para decir que la importancia de las modificaciones que deben llevarse adelante no sólo plantea numerosas dificultades, sino que nos expone a la incertidumbre de hallar nuevos problemas frente a cada paso dado, ya que el terreno a recorrer que impone la nueva legislación no sólo es novedoso sino también totalmente distinto al modo en que se administra justicia penal en nuestra provincia. Es preciso que todos los operadores nos pongamos a tono con la reforma. Desde el rol que nos toque cumplir como operadores judiciales (jueces, fiscales, policías y abogados) predisponernos al cambio. Las exigencias debemos entenderlas en relación a la mayor calidad que se logrará en el resultado final: el afianzamiento de la justicia."