La jueza del Tribunal de Familia Nº 3, María José Diana, resolvió otorgar a un padre separado de su pareja el cuidado de la hija de ambos.

  El hombre presentó una demanda de protección de persona de su hija.

  Tras la separación la madre de la menor de 9 años comenzó una relación sentimental con otro hombre y tuvieron un hijo.

  La niña manifestó su desagrado hacia la actual pareja de su madre, asegurando que la insulta con malas palabras, le dice “bastarda” y que “su padre no la quiere”. Además, destacó la inactividad de la madre frente a tales insultos y refirió que se encuentra feliz viviendo con su padre y que es ahí donde quiere estar.

    Expuso claramente que “es su deseo vivir con su papá y aunque indica que no extraña a su mamá manifiesta que podría verla de vez en cuando en la casa de su abuela pero sin la presencia de la pareja a quien le tiene mucho miedo”.

   En la resolución la magistrada sostiene que “resulta lamentable afirmar que la menor se encuentra en medio de una disputa entre sus padres y que, de manera fundamental, también se encuentra inmersa en un círculo de violencia fomentado por la actual pareja de su madre, situaciones que le acarrean fuertes consecuencias emocionales”.

   Agrega que “mientras la niña está en la casa de su madre protagoniza toda una serie de situaciones que, a todas luces, afectan su psiquis y, por ende, su crecimiento, y que son auspiciadas de manera fundamental por la actual pareja de su madre. Circunstancias que, a todas luces, no se presentan como las mejores opciones para la formación de esta pequeña”.

  La jueza Diana intimó a los progenitores a proponer el régimen de contacto entre la madre y su hija, excluyendo necesariamente la presencia de la pareja de la mujer.

  Atribuyó al padre el cuidado principal de su hija, quien residirá mayormente en el domicilio de su progenitor.

  Abogada patrocinante: CLAUDIA MENDOZA